Redacción. Madrid
Aresa, la aseguradora de Salud del Grupo Mutua Madrileña, ha desarrollado durante el último año un programa de seguimiento domiciliario de pacientes EPOC que ha reducido un 70 por ciento el número de días de ingreso hospitalario para los 120 pacientes que se han acogido de forma voluntaria a esta iniciativa.

María José Salcedo, subdirectora médico de Aresa.

Integrado en el Plan Integral de Pacientes Crónicos de Aresa Salud, este programa de visitas es un paso más en el posicionamiento de la Medicina Personalizada de la compañía por adaptarse a las necesidades de sus asegurados. Cabe destacar a este respecto que el grado de satisfacción de los pacientes ha sido muy alto (el 70 por ciento afirma estar “completamente de acuerdo” y el 30 por ciento “de acuerdo”), habiendo completado esta prueba clínica el cien por cien de los implicados.

Junto con la reducción temporal de días de ingreso y la satisfacción de los pacientes, el programa ha traído también consigo un ahorro de 195.000 euros para Aresa en hospitalizaciones evitadas.

Iniciado en septiembre de 2009, el programa fue diseñado como un conjunto de actividades integradas que nació con el objetivo de reducir el número de reingresos, mejorar la calidad de vida del paciente y su familia, y aportar una mayor satisfacción a los pacientes con el servicio global de Aresa.

El programa incluye, entre otros servicios, el seguimiento programado médico y de enfermería, el tratamiento médico en domicilio, la implicación del cuidador y un call center y un servicio de sms al servicio de los pacientes las 24 horas del día.

Aresa, la compañía especializada en seguros de salud del grupo Mutua Madrileña, ofrece seguros de salud completos y con las máximas prestaciones, con acceso a todas las coberturas médicas, los mejores medios de diagnóstico y los tratamientos más eficaces y modernos. Y todo ello con un extenso cuadro médico formado por más de 27.000 especialistas y 800 centros médicos de reconocido prestigio, entre los que se encuentran sus centros médicos propios de alta resolución en Madrid (Clínica San Bernardo) y Barcelona (Clínica Olivé Gumá).